Si existe algo saludable en cocina son las verduras. Hoy os traemos esta receta que lleva un popurrí de ellas.
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Lo primero es poner a cocer las patatas lavadas con las zanahorias peladas en una olla con abundante agua y sal.
Una vez las patatas estén tiernas, escúrrelas, pélalas y machácalas con la ayuda de un tenedor. Las zanahorias cocidas se cortan en daditos.
Ponemos a sofreír la cebolla, el ajo y el pimiento, todo ello bien picado, en una cazuela con un poco de aceite de oliva.
Rehogamos el conjunto hasta que la cebolla se cueza levemente.
Entonces, agregamos las setas troceadas y continuamos rehogando hasta que las setas hayan soltado todo su jugo. Incorporamos las espinacas y cocinamos durante 2 minutos.
Retiramos la cazuela del fuego y añadimos el puré de patata, las zanahorias, la nata y los huevos.
Salpimentamos y mezclamos hasta que quede la forma de pure.
Rellenamos unas flaneras individuales (untadas en su interior con mantequilla) con el puré obtenido y espolvorea con abundante queso rallado.
Ya sólo nos queda introducir las flaneras en el horno y gratinar a 180ºC. Cuando el queso esté fundido y bien dorado, sacamos del horno y dejamos templar.
Una vez templadas, pasamos un cuchillo por las paredes interiores de las flaneras y desmoldamos los pasteles.
Acompañamos con una salsa de tomate.